Buenas noticias para los fanáticos de la limpieza: no más desperdicio de dinero en detergentes para lavavajillas comerciales.
Una combinación de productos conocidos puede hacer frente a la tarea con la misma eficacia: en cualquier caso, las amas de casa que utilizan activamente este truco se aseguran de que sus tazas y platos brillen y chirrían, por supuesto, debido a la limpieza.
Por eso, una de las mejores alternativas a los productos de limpieza comprados en las tiendas es el bicarbonato de sodio.
Es capaz de superar las manchas de grasa y rebeldes, los restos de hollín y de quemaduras y, además, eliminar los olores extraños y, por tanto, desagradables.
La soda es adecuada para lavar porcelana, loza, vidrio, acero, plata y esmalte. No se recomienda limpiar el teflón con bicarbonato de sodio para evitar dejar rayones.
El segundo producto es la mostaza, que es un absorbente natural que absorbe la grasa.
Se puede utilizar para lavar una sartén en la que se frió pescado o carne.
En conclusión, compartiremos un truco útil: para que sea más cómodo usar detergentes lavavajillas caseros, mezcle bicarbonato de sodio y mostaza en cantidades iguales y vierta la “combinación” resultante en un recipiente para especias con agujeros en la tapa.