Lamentablemente, aquellos a quienes les gusta disfrutar de cerezas deliciosas y saludables suelen ser víctimas del engaño cuando compran la baya.
Los comerciantes sin escrúpulos son especialmente activos en los llamados mercados espontáneos.
Por eso, a la hora de elegir un producto, no debes avergonzarte de mirarlo y tocarlo.
Los expertos dicen: las cerezas frescas deben ser brillantes y elásticas al tacto.
Al comprar una baya, mete la mano en la bandeja y saca los frijoles de abajo.
Después de todo, sucede que los vendedores ponen encima bayas de aspecto impecable y esconden debajo las marchitas o las que ya han comenzado a deteriorarse.
Los expertos recomiendan: no compre frutos rojos brillantes, es mejor elegir los oscuros.
Y, en principio, es recomendable introducirlos usted mismo en el paquete, después de examinarlos detenidamente.
Los expertos también recomiendan prestar atención a si la bandeja está mojada. En caso afirmativo, esto significa que las bayas están echadas a perder o han comenzado a pudrirse.
En esta situación, otros frijoles no permanecerán sanos y salvos durante mucho tiempo.
Vale la pena prestar atención al olor, que no debe tener notas ácidas.
Si las hay, debes saber que las bayas están dañadas o están empezando a fermentar.
Anteriormente te contamos dónde guardar el pan para que se mantenga fresco por más tiempo.