Es desagradable cuando una toalla de felpa se vuelve dura: dificulta el secado.
En tal situación, el ama de casa probablemente querrá devolverle al producto suavidad y esponjosidad.
Lo primero que se nos viene a la cabeza es lavar la toalla con acondicionador.
Sin embargo, hay un problema: este producto no es adecuado para tejidos de rizo.
Por ello, tenemos que buscar formas alternativas de devolver suavidad, limpieza y frescura a las toallas.
Y las amas de casa experimentadas han encontrado desde hace mucho tiempo un remedio que les salva vidas. Estamos hablando de una mezcla de polvo doméstico y bicarbonato de sodio.
Cómo preparar un remedio milagroso
Toma el jabón para lavar y muélelo parcialmente usando el lado del rallador donde se encuentran los pequeños agujeros en forma de gota.
Deje las virutas resultantes en algún recipiente durante varias horas.
Durante este tiempo, el producto se volverá más seco. Se convertirá fácilmente en polvo. Y se puede mezclar con bicarbonato de sodio.
Por 70 gramos de jabón para lavar ropa debe haber 30 gramos de bicarbonato de sodio.
Como resultado, obtendrá ese remedio que le salvará la vida para que las toallas vuelvan a estar limpias.
Coloque las prendas en el tambor de la lavadora. Vierta allí la mezcla de jabón y refresco.
El lavado debe realizarse a una temperatura de 60 grados.
El resultado del procedimiento será la devolución de la suavidad a las toallas. Además no quedará ni una mancha en tus cosas. Y el hedor desaparecerá.
Anteriormente te contamos cómo acabar con los olores desagradables en la cocina.