Si las zapatillas blancas o cualquier otro zapato de color claro están gastadas, esto no es motivo para tirarlas.
Puedes intentar darle una oportunidad de "vida" limpiándolo con ingredientes simples, los cuales probablemente ya tengas en casa.
Qué necesitas exactamente: para limpiar tus zapatos debes llevar pasta de dientes, bicarbonato de sodio y cualquier producto de limpieza.
Mezcla una cucharada de todos los ingredientes hasta obtener una pasta espesa.
Aplica la mezcla a tus zapatos con un cepillo de dientes viejo.
No es necesario escatimar en producto de limpieza: deja que la capa sea generosa por toda la superficie de los zapatos, especialmente en aquellos lugares donde la suciedad es más intensa.
De esta forma conviene dejar tu par blanco favorito unos minutos para que se absorba y haga efecto.
Después de un tiempo, vuelve a pasar la superficie del zapato con un cepillo de dientes y luego enjuaga la pasta con agua tibia.
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