Probablemente todos hayamos oído hablar de la propiedad mágica del aceite de girasol, que nos ayuda a deshacernos de las pegatinas de fábrica y los restos de pegamento de varios objetos.
Sin embargo, a pesar de todas sus ventajas, este método tiene varias desventajas.
En primer lugar, el aceite de girasol no siempre soluciona eficazmente algunas pegatinas: no siempre sucede.
En segundo lugar, puede que no resulte muy agradable trabajar con él debido a su olor específico y su textura aceitosa.
Y en tercer lugar, después de usar aceite para limpiar, es necesario lavarse bien no solo las manos, sino también todas las superficies limpias.
Un contrapeso a esta solución es el aceite de limón.
No deja residuos grasos, tiene un agradable aroma y hace más cómodo el proceso de limpieza.
Y otra propiedad positiva del aceite de limón es que puedes comprarlo fácilmente en oferta, porque te durará todo el tiempo que necesites sin problemas si lo dejas en un lugar oscuro.
Anteriormente te contamos por qué debes frotar tu bañera con pomelo.