La limpieza de la cocina no se puede considerar buena si la campana permanece sucia.
Sin embargo, los depósitos de grasa y carbón de la parrilla pueden llegar a los alimentos, lo que sólo puede causar problemas de salud adicionales.
Al mismo tiempo, el proceso de lavado puede parecer complicado y tedioso.
Pero resulta que el procedimiento se puede simplificar enormemente si se conocen algunos trucos.
Para ello, retira la rejilla y colócala en un recipiente con una solución sencilla pero eficaz.
Posteriormente, es necesario diluir aproximadamente media pastilla de jabón para lavar ropa rallada y un vaso de vinagre de mesa en agua tibia.
Se debe dejar la rejilla en esta solución durante 10 minutos y luego se debe lavar con una esponja dura para eliminar los restos de suciedad.
Al final del procedimiento, solo queda enjuagar la prenda con agua corriente limpia y secarla.
Es recomendable repetir esta limpieza al menos una vez cada tres meses.
Anteriormente te contamos cómo elegir una campana para la cocina.