Lavar cristales no es la tarea más agradable y resulta bastante tediosa.
La situación empeora si, después de un lavado regular, quedan manchas en la superficie. No puedes dejar ventanas con tales marcas.
Al mismo tiempo, no es necesario que corra a la tienda con productos químicos domésticos.
Aquí debe utilizar medios adicionales y económicos que solucionarán el problema sin ningún problema.
El vinagre de mesa, el amoníaco o la solución jabonosa ayudarán en este asunto.
Después de lavar las ventanas, límpielas con una toalla tipo gofre seca para eliminar completamente la humedad. El vidrio brillará por la limpieza.
Pero a veces es más fácil prevenir los divorcios que afrontarlos.
En este caso, es necesario tener en cuenta reglas simples.
Por ejemplo, no debe lavar las ventanas en un día soleado, de lo contrario todos los detergentes se derramarán rápidamente sobre la superficie.
También debe limpiar el polvo del vidrio, los marcos y los alféizares de las ventanas antes de lavarlos.
Anteriormente te contamos cómo preparar un limpiacristales.