No hay necesidad de apresurarse a tirar los posos del café a la basura.
La cuestión es que ese tipo de desperdicio puede resultar útil. Algunas personas prefieren hacer exfoliantes naturales con este producto, pero la base también ayudará en la vida cotidiana.
Pocas personas lo saben, pero los posos de café son una excelente manera de combatir los olores desagradables en el frigorífico.
El proceso de uso es lo más sencillo posible.
Basta con secar un poco de pastel en una taza aparte después de preparar la bebida aromática, y luego los restos se deben colocar en el estante del refrigerador.
Los posos absorben perfectamente el exceso de aromas.
Sólo es importante cambiarlo periódicamente.
Es recomendable repetir el procedimiento una vez al día, pero para mayor eficacia puedes cambiar el bizcocho dos veces al día.
Primero debes limpiar el refrigerador de alimentos en mal estado y lavar los estantes con una solución de refresco o vinagre.
Este sencillo método le dará un buen uso al café molido para mantener fresca su cocina.
Anteriormente te contamos de qué otra manera puedes deshacerte del olor en el frigorífico.