Es difícil imaginar una situación en la que un ama de casa se quede sola en la cocina con patatas sin pelar, sin cuchillo ni pelador de verduras.
Por ejemplo, puedes poner en marcha el lavavajillas y recordar que dentro quedan cuchillos sucios. No importa, la gente tiene algunos trucos reservados para este caso.
Esto es lo que ofrecen los expertos del portal thekitch en este caso.
Primero debes poner una olla con agua al fuego. Debe haber suficiente agua para cubrir las patatas.
Seleccionamos tubérculos del mismo tamaño (para que se cocinen uniformemente), los enjuagamos con agua corriente y los colocamos en una cacerola.
Cocine las verduras durante 15-20 minutos. Cuando las patatas se puedan pinchar fácilmente con un palillo, estarán listas.
Prepara un bol con agua muy fría para los tubérculos. No estaría de más ni siquiera echarle un poco de hielo.
Escurre el agua y sumerge las patatas en un recipiente con agua helada.
Enfríe las patatas durante aproximadamente un minuto y retírelas del agua.
Debido a los cambios de temperatura, la piel de la papa se volverá suave y flexible.
Puedes pelar patatas literalmente con las manos desnudas y sin mucho esfuerzo.
Por cierto, las amas de casa utilizan este mismo truco con agua helada cuando necesitan pelar muchas patatas asadas.
La tecnología se repite con precisión, solo antes de cocinar es necesario hacer un corte transversal en cada tubérculo (si, por supuesto, tienes un cuchillo a mano).
Después de enfriar, pelar las patatas será muy sencillo: basta con tirar de la piel en diferentes direcciones.