Esta contaminación arruina toda la impresión, incluso en el caso de reparaciones costosas.
Pero para deshacerse de la placa lo más rápido posible, basta con tomar un producto que generalmente ya se encuentra en casi todas las cocinas.
Estamos hablando de vinagre de mesa común y corriente.
El proceso de uso es lo más sencillo posible.
Basta con aplicar un poco de vinagre en un trapo o disco de algodón, que se debe colocar sobre las manchas.
Después de 15 minutos, elimine los depósitos reblandecidos restantes con un paño limpio y enjuague la superficie.
Si es necesario, se puede repetir el procedimiento.
Si la contaminación es grave, conviene añadir al vinagre un poco de detergente en polvo o jabón líquido.
Si el vinagre te parece demasiado fuerte, puedes utilizar jugo de limón. Debe diluirse con agua en una proporción de 1 a 1, luego dejarse sobre las manchas y lavarse después de unos minutos.