La alfombra, como saben, tiene una propiedad muy desagradable: su capacidad para absorber el polvo.
Desafortunadamente, ni siquiera una aspiradora ultrapotente puede limpiarlo al 100%.
A pesar de la limpieza regular con una aspiradora, el polvo y otros desechos que disgustan a muchas amas de casa todavía permanecen en la pila, que solo se acumula con el tiempo.
Como resultado, en lugar de una alfombra agradable al tacto, se obtiene una alfombra pegajosa y sucia, especialmente cuando se trata de una alfombra colocada en el suelo de la cocina.
En este caso, recurrir a los servicios de tintorería es sin duda un método eficaz, pero no siempre viable debido a su elevado coste.
Afortunadamente, existe una opción que puede ayudarte a lidiar con las manchas que se han asentado en la alfombra de tu cocina sin ayuda externa.
Para hacer esto, espolvoree almidón sobre la superficie del piso y déjelo allí durante varias horas.
Luego, por supuesto, hay que aspirar la alfombra: de esta forma podrás refrescarla, hacerla esponjosa y eliminar el olor desagradable.