Estamos acostumbrados a que en los frigoríficos solo se almacenen alimentos, ya que para esta finalidad está destinado el equipo.
Sin embargo, las amas de casa experimentadas a veces ponen cosas muy extrañas en el frigorífico.
A veces parece que los ponen ahí simplemente por olvido.
Pero esto está lejos de ser cierto. De hecho, existe una explicación muy razonable para tales acciones.
¿Por qué guardar papel higiénico y esponja en el frigorífico?
Seguramente te habrás encontrado con el hecho de que la condensación se acumula en el frigorífico después de un cierto período de tiempo. Los altos niveles de humedad son un excelente hábitat para la flora patógena.
Como resultado, el frigorífico comienza a verse descuidado e incluso desprende un olor desagradable.
Además, los productos pueden empezar a deteriorarse mucho más rápido de lo esperado.
Resulta que tanto el papel higiénico como la esponja van al frigorífico con un solo propósito: evitar que se produzca este problema.
Por lo tanto, es necesario enviar una esponja o un rollo de papel nuevo una vez a la semana. Estos artículos deben desecharse después de la refrigeración. Para potenciar su efecto, también puedes verter en el bol una pequeña cantidad de refresco o unas pastillas de carbón activado.