Las amas de casa experimentadas nunca dejan cucharas o cucharas simples en una olla de sopa o en cualquier otro plato.
En primer lugar, según la creencia popular, tal acción se considera incorrecta.
En segundo lugar, la prohibición también tiene una explicación racional.
Veamos tanto el primer como el segundo matiz.
Señales
Nuestras abuelas creían que la costumbre de dejar un cucharón o una cuchara en la sartén con el primer o segundo plato podía tener consecuencias indeseables.
Por lo tanto, muchos representantes de la generación anterior confiaban en que la acción anterior podría privar a la anfitriona de la suerte monetaria.
Además, se creía que la familia en este caso podría enfrentarse a la pobreza.
El lado racional del problema.
Incluso las personas no supersticiosas deberían prestar atención a la recomendación.
El caso es que dejar un cucharón u otros cubiertos de metal en una sartén con comida durante mucho tiempo puede provocar un deterioro de la calidad de la comida.
Y esto se explica por la oxidación del metal. Es posible que este proceso haga que la sopa se vuelva amarga rápidamente.