Las incrustaciones que se forman con el tiempo en cualquier hervidor son un problema bastante común.
Debido a los depósitos en el fondo y las paredes del recipiente, el sabor y la calidad del agua cambian, y no para mejor.
Para hacer frente a tal molestia, las amas de casa experimentadas utilizan todo tipo de medios disponibles, entre los que destacan los refrescos, el jugo de limón y las bebidas carbonatadas.
Pero hay otro método que puede considerarse con seguridad el más simple y conveniente entre todos los existentes.
El método en cuestión se basa en el uso de vinagre.
La acción es la siguiente. Primero, llene el hervidor hasta la mitad con agua y luego agregue 3-4 cucharadas de vinagre al 9%.
Espere hasta que hierva la solución ácida. Por cierto, esto debe hacerse con la ventana abierta para que los vapores nocivos y los olores desagradables no permanezcan en la habitación.
Después de esto, se debe verter la solución de vinagre, llenar el hervidor con agua limpia y hervir nuevamente. Esto debe hacerse 2 o 3 veces.
Todo lo que queda es enjuagar bien el hervidor con agua corriente y podrás volver a utilizarlo para las necesidades diarias.