Cualquier ama de casa lo sabe: de la cocina sólo se deben escuchar aromas agradables.
Pero a veces también sucede que aparecen olores en la habitación de la que quieres huir.
Por eso consideramos necesario compartir un truco que ayudará a eliminar el olor repulsivo que aparece en el horno.
Para ello necesitarás un limón y una pastilla de jabón común.
El jabón sólido se debe moler con un rallador y luego las virutas resultantes se deben mezclar con jugo de limón exprimido hasta formar una mezcla espesa y homogénea.
Coloca el recipiente lleno de este producto en el horno y déjalo ahí toda la noche.
Por la mañana, sólo tienes que sacar el bol e inhalar profundamente el agradable aroma cítrico que sale del horno abierto.
No olvides lavar el recipiente en el que se encontraba el “sabor” sumergiéndolo en agua tibia con una gota de detergente lavavajillas y ventilar la cocina.
