Las cerezas no solo son sabrosas, sino también muy saludables.
Pero para obtener realmente los beneficios, es importante elegir las bayas adecuadas en el mercado o en la tienda.
En primer lugar, debes prestar atención al color de la cereza.
Debe quedar brillante, uniforme y rico. Si no es así, existe el riesgo de que los frutos no hayan tenido tiempo de madurar, escribe RIA Novosti citando a expertos de Roskachestvo.
Además, como señalan los expertos, no sería superfluo prestar atención al estado de los pecíolos. Si están secas y marrones, esto indica que las cerezas han estado almacenadas durante demasiado tiempo y es posible que ya hayan perdido su jugosidad.
Las bayas en sí no deben reventarse, arrugarse ni secarse.
Hay que recordar que las frutas deben lavarse antes de su uso.
Pero no es necesario lavar todas las frutas, sino sólo aquellas que se utilizan como refrigerio, para evitar que las verduras se marchiten. Las bayas deben guardarse en el frigorífico.