Ya no tendrás que rociar ambientador ni perfume valioso.
A veces, el olor a humedad se “instala” en el armario y poco a poco se va impregnando de todo.
Es difícil deshacerse de él. Ni siquiera el perfume enmascarará este aroma específico, que otros definitivamente olerán.
Sin embargo, las amas de casa experimentadas han encontrado una manera de devolver la frescura a las cosas. Se puede lograr un resultado ideal sin ambientador.
Para ello, coge un paño húmedo, vierte un puñado de arroz y aplica 2-3 gotas de aceite esencial. Por ejemplo, si lo tomas con aroma a lavanda, cuando abras el armario, se esparcirá un aroma agradable, como si detrás de la puerta no hubiera cosas, sino un campo de lavanda.
Luego debes mezclar bien el cereal, juntar los bordes de la servilleta y atarlo para formar una bolsa. O puedes asegurar los bordes con una banda elástica.
Esta bolsa se puede colgar en un travesaño con cosas o colocar en un estante donde no estorbe. Para llenar todo el armario con un aroma agradable, tendrás que hacer de 3 a 4 bolsas de este tipo.