Muchas amas de casa son muy reacias a aceptar lavar ventanas, ya que esta tarea que consume mucha energía no produce un efecto duradero.
Por lo tanto, hay que limpiar el cristal con demasiada frecuencia para que la casa luzca ordenada.
El problema se vuelve especialmente urgente en la estación cálida, cuando aparece mucho más polvo. Afortunadamente, existe un método sencillo que brindará protección a largo plazo contra la contaminación.
¿En qué consiste?
El primer paso es lavar los cristales de la forma habitual para eliminar la suciedad visible. No tiene que preocuparse por la presencia de divorcios; pronto no quedará ni rastro de ellos.
Después de esto, debes aplicar una pequeña cantidad de cualquier acondicionador para ropa en un paño limpio y suave.
Aplícalo en las ventanas, espera un par de minutos y pule con un paño limpio.
La misma técnica se puede utilizar en cualquier mueble con inserciones de vidrio. También será posible ordenar los espejos.
Notarás que las ventanas y superficies de vidrio permanecen limpias y ordenadas durante un largo período de tiempo.