No discuta: cualquier ama de casa hará todo lo posible para facilitarle las tareas diarias en la casa.
Por ejemplo, para tener que dedicar menos tiempo a limpiar un horno microondas, las pedantes "amas de casa" utilizan "tapas" protectoras especiales que no permiten que gotas de grasa y trozos de comida manchen las paredes del dispositivo desde el interior.
Sin embargo, esa pulcritud a veces no es inherente a todos los miembros de la familia.
Por ejemplo, los niños o el marido, o quizás una suegra dañina, pueden simplemente olvidarse de la existencia de protección, razón por la cual el microondas se mancha después de cada uso.
En lugar de intentar arreglar las cosas con tu familia en voz alta, coloca un recipiente lleno de agua en el microondas y enciende el dispositivo durante 5 a 10 minutos (dependiendo del grado de contaminación).
Pasado el tiempo indicado, solo tendrás que retirar la suciedad seca con un paño suave.
El limón ayudará a que la limpieza sea aún más eficaz y, lo más importante, dejará un olor agradable.
Basta agregar al agua fruta fresca, ácido cítrico o jugo concentrado.