Los depósitos de grasa y las manchas son los tipos de suciedad más habituales en la cocina con los que se encuentra toda ama de casa.
Existen varios remedios caseros a los que ni siquiera la placa aceitosa vieja puede resistir.
Ácido cítrico
El detergente se prepara a partir de 15 g de ácido cítrico, una pequeña cantidad de jabón para platos y 1 litro de agua tibia.
Humedezca una esponja o un trapo en la solución resultante y luego limpie las áreas contaminadas. Dejar actuar de 5 a 10 minutos y luego enjuagar con agua limpia.
Limón
Hay una manera más fácil. Corta el limón fresco en rodajas y luego limpia las manchas de grasa con ralladura y jugo. Luego espere 10 minutos y luego enjuague con agua limpia.
Cómo deshacerse de la grasa rebelde
Para una limpieza más profunda y profunda, utilice vinagre (6%) y alcohol isopropílico.
Primero se mezclan los productos en una proporción de 7:1. Agrega unas gotas de jabón líquido a la solución.
Utilice la mezcla resultante para limpiar la superficie cubierta con depósitos de grasa. Para ello se suele utilizar un paño de microfibra.
Déjelo durante 3 a 5 minutos y luego limpie las superficies con un paño empapado en agua limpia y tibia.