El electrodoméstico más sucio de la cocina es la campana.
Algunas personas olvidan que también es necesario lavarlo de vez en cuando.
Vale la pena recordar que la suciedad y la grasa de la campana pueden llegar a los alimentos.
Pero no te asustes y utilices productos químicos para la limpieza; puedes utilizar sal de mesa.
Debes tomar una cacerola y verter en ella 500 gramos de sal, verter agua y calentarla, la solución no debe hervir.
Puedes quitar el filtro de la campana y hervirlo en un cazo durante diez minutos.
O puedes verter agua salada en un recipiente y sumergirla allí si es de gran tamaño.
Si el filtro no limpia, deberás repetir la manipulación nuevamente o mantenerlo en la solución salina por más tiempo.