Las amas de casa experimentadas saben que no deben guardar todas las verduras en un cajón, aunque sea el frigorífico.
Es en este caso cuando se deterioran más rápido de lo esperado. Te contamos cómo no debes almacenar las patatas y con qué vecinos se pudrirán o se ablandarán mucho más rápido.
El vecino más dañino para las patatas son las cebollas. Los tubérculos se echan a perder más rápido de lo esperado, a pesar de que se han creado las condiciones en el frigorífico para su almacenamiento a largo plazo.
La razón es el etileno, que liberan abundantemente las cebollas, así como otras verduras y frutas (por ejemplo, tomates, manzanas y plátanos).
En cuanto a la cebolla en sí, la proximidad de los tubérculos de patata tampoco prolonga su vida útil.
Las patatas contienen una cierta cantidad de humedad, lo que está contraindicado en las zonas de almacenamiento de cebollas. Debido a esto, los bulbos se ablandan y se deterioran rápidamente.
Dónde almacenar patatas
No hay mejor lugar que seco, oscuro y bien ventilado. Por lo general, para las patatas se eligen recipientes con opciones de ventilación.
Pero el principal enemigo de las patatas es el calor y la luz. Así empezará a brotar y ponerse verde. Y si la humedad es alta, los tubérculos se pudrirán más rápido de lo que podrán comerse.
