Las amas de casa experimentadas utilizan un pequeño truco que funciona tanto con productos caseros como comprados en la tienda.
El moho causa problemas no sólo en el baño o en el balcón. También hace que los alimentos no sean aptos para el consumo.
La pasta de tomate es un complemento popular para la pasta, las patatas o la carne. Agrega un toque picante al plato, pero a menudo se convierte en un verdadero caldo de cultivo para el moho.
Para evitar traducir productos, solo debe hacer una cosa. El truco preservará la pieza de trabajo y te permitirá disfrutarla por más tiempo.
La tapa del frasco en el que se guardará la pasta de tomate se debe untar con una fina capa de mostaza. Este producto se considera un conservante que previene el crecimiento de moho.
El truco funciona con pasta comprada en la tienda que no se ha utilizado en un corto período de tiempo. La mostaza prolongará su vida útil una vez que se abra el frasco.
Para aumentar la fiabilidad del truco, se recubren no solo el interior de la tapa, sino también la parte superior de las paredes del cuello.