Muchos propietarios de alfombras se quejan de que las esquinas de la alfombra se curvan de forma antiestética.
Si tienes suelos de madera, clavar ayudará a solucionar el problema.
Por supuesto, no deberías intentar fijar la alfombra al suelo simplemente con clavos; en su lugar, deberías utilizar una grapadora o una tira.
Gracias a los soportes, los puntos de fijación serán prácticamente invisibles para las miradas indiscretas y el daño al suelo será mínimo.
La tabla ayudará a presionar los bordes de la alfombra, creando un borde limpio.
Pero medidas tan radicales pueden no ser útiles si se utiliza un truco de vida popular.
Para darle vida necesitarás agua tibia y peso. Moje bien el borde rebelde y coloque algo pesado encima, por ejemplo, el mismo balde lleno de agua.
La alfombra deberá permanecer en esta posición durante 12 horas, tras las cuales se podrá retirar la carga y esperar a que la alfombra se seque por completo.