Los zapatos abrigados de otoño a primavera estarán protegidos confiablemente por fondos presupuestarios.
No todo el mundo tiene prisa por comprar sprays especiales. Algunas personas dudan por el fuerte olor a “químicos”; otras simplemente quieren ahorrar dinero.
Pero todo el mundo quiere darle a sus zapatos un aspecto presentable y prolongar su vida útil. Estos dos problemas se pueden solucionar con un remedio popular.
Repelente de humedad
Para proteger tus zapatos de la humedad, necesitarás cera de vela. Debes derretirlo en un baño de agua y luego frotar tus zapatos o botas con un trapo. Se presta especial atención a las costuras.
La cera crea una película protectora a través de la cual no penetra el agua. Por tanto, el producto realizará la misma tarea que un spray comercial.
Además, con fines preventivos, los expertos aconsejan limpiar periódicamente los zapatos con aceite de girasol.
Puedes usar parafina en lugar de cera. También se prepara una mezcla con glicerina:
- glicerina – 20 g;
- aceite de pescado – 40 g;
- trementina – 30 g;
- cera de abejas o parafina – 10 g.
Los ingredientes se mezclan y luego se aplican sobre la piel con un trapo o una esponja.