Normalmente, cuando se trata de blanquear calcetines o cuellos desgastados, se utiliza lejía u otros productos industriales.
En casos avanzados, la ropa se hierve y sólo las amas de casa con experiencia en el mundo se dedican a trucos trillados por el tiempo.
A continuación te explicamos cómo devolverle el brillo deslumbrante a tu ropa blanca.
Método número 1: ácido bórico
Una excelente opción cuando necesitas ordenar prendas pequeñas y gastadas, como calcetines, bufandas o camisetas. Esta misma opción elimina las manchas rebeldes y sirve como medio para prevenir enfermedades fúngicas.
Entonces, disuelva el ácido bórico en agua tibia (20 gramos por 10 litros de agua), remoje la ropa sucia en la solución durante un par de horas y luego póngala en la lavadora o póngala en orden a mano.
Método número 2: permanganato de potasio
No solo elimina las manchas, sino que también salva las prendas blancas que se han vuelto amarillentas con el tiempo. Necesitará 200 gramos de detergente en polvo adecuado, 10 litros de agua y unos cristales de permanganato. El polvo se mezcla en agua caliente hasta su completa disolución y el permanganato de potasio se diluye por separado para obtener una solución de color rosa claro.
Luego lo vierten en agua con polvo, colocan allí la ropa y la tapan con una tapa, y cuando el agua se enfría la lavan en una máquina.
Sin embargo, estos métodos no deben utilizarse siempre. Es recomendable mantener un intervalo de 1 vez cada 3-4 lavados, de lo contrario la tela quedará rápidamente inutilizable.