¿Has notado que la crema agria a menudo se echa a perder antes de poder agregarla al borscht o untarla en un panqueque?
Resulta que todo se debe a los pequeños errores de almacenamiento que casi todos cometemos.
Pero hay una manera de convertir su refrigerador en un refugio seguro para su producto favorito.

Vidrio en lugar de plástico: por qué es importante
La crema agria “respira” y sólo un frasco de vidrio proporciona el equilibrio correcto de humedad y temperatura.
Los envases de plástico o de fábrica crean un efecto invernadero, acelerando el proceso de acidificación.
Antes de usarlo, esterilice el frasco con agua hirviendo; esto destruirá las bacterias que podrían estropear el producto.
Girar para guardar
Después de transferir la crema agria al frasco, ciérrelo con una tapa hermética y colóquelo boca abajo. Este truco creará un vacío dentro del recipiente, bloqueando el acceso del oxígeno, el principal culpable de la fermentación.
Guarde el frasco no en la puerta, donde la temperatura es inestable, sino en el estante medio del refrigerador.
Una cosa más: utiliza siempre una cuchara limpia. Cualquier migaja u otra partícula de comida iniciará el proceso de crecimiento bacteriano.
Si notas que la crema agria se ha vuelto líquida, pero el olor permanece fresco, aún se puede guardar. Añade una pizca de sal, revuelve y usa para hornear o salsas.
Ahora la crema agria te deleitará no durante cinco días, sino durante diez.
¡Compruébelo usted mismo y comparta los resultados con aquellos que todavía tiran la mitad del paquete!