Contrariamente a la creencia popular, la piel de la manteca de cerdo es comestible.
Y también muy útil. Te contamos cuáles son los beneficios de las pieles de manteca y cómo utilizarlas correctamente.
¿Cuáles son los beneficios de las pieles de manteca?
La piel de manteca de cerdo contiene vitaminas E, H, PP y del grupo B, colina, calcio, potasio, magnesio, sodio, fósforo, hierro y proteínas.
Comer pieles de manteca de cerdo es bueno para la piel, las uñas, el cabello, las articulaciones y los huesos.
Eso sí, no se puede comer la piel directamente con manteca de cerdo; hay que prepararla de una forma determinada;
Por ejemplo, la piel se puede hervir. Separar la piel de la manteca, pelar, cortar en tiras y cocer en agua con la piel de la cebolla.
La piel también se puede consumir frita, pero sólo para quienes no tengan problemas digestivos.