Cualquier ama de casa quiere que su tortilla luzca hermosa en el plato cuando la sirva, pero no todos los platos conservarán su forma en este momento.
Aunque la tortilla parezca esponjosa en la sartén, puede perder su volumen en cuestión de segundos.
Sin embargo, los especialistas culinarios pudieron descubrir que algunos aditivos pueden solucionar este problema.
¿Qué se agrega a una tortilla?
Zumo de limón
Pocas personas conocen este secreto, aunque los profesionales suelen utilizarlo. El jugo de limón es un producto único que garantiza darle al plato una estructura fuerte y esponjosa.
Sólo hace falta añadir un poco de jugo: un cuarto de cucharadita para una tortilla hecha con dos huevos medianos será suficiente.
No hay necesidad de preocuparse por el sabor amargo: definitivamente no lo habrá.
Gachas de sémola
Este secreto parece aún más extraordinario, pero ya ha demostrado su eficacia. Algunas personas añaden sémola propia, pero con papilla el resultado será más fiable.
Para dos huevos puedes tomar 3-4 cucharadas de papilla.
Este plato mantendrá su forma el tiempo que sea necesario.
Anteriormente hablamos sobre lo que las amas de casa experimentadas agregan a la sartén cuando hierven huevos .