Las especias nos ayudan a hacer que cualquier carne sea aún más apetecible, pero sólo si se eligen correctamente.
Hoy te invitamos a hablar sobre la carne de cerdo.
Las hierbas clásicas son adecuadas para este tipo de carne, incluidos el familiar eneldo y el perejil y los menos comunes romero, tomillo, albahaca y orégano.
Todas estas especias se pueden utilizar frescas o secas, individualmente o en mezcla.
Además, el chile, el pimentón y la nuez moscada crean una “unión” armoniosa con la carne de cerdo frita o al horno.
También sucede que quieres experimentar nuevos sabores y aromas: en esto te ayudarán la cúrcuma, el jengibre y el sésamo, lo que le dará al plato terminado un toque oriental.
Finalmente, te compartiremos un pequeño truco más: si te gusta la cocina, probablemente te hayas encontrado con recetas que sugieren cocinar carne de cerdo con azúcar o miel.
De hecho, esta combinación es muy, muy buena, pero no olvide que el dulzor debe equilibrarse con ácido, por ejemplo, vinagre o pasta de tomate.
Anteriormente te contamos cómo cocinar rollito de cerdo con ciruelas pasas y nueces.