¿Qué tipo de borscht es este sin freír?
De acuerdo con la receta clásica, para preparar este “componente” del primer plato necesitarás verduras como cebollas, zanahorias y remolachas.
Estos no son todos los ingredientes: también hay que añadir pasta de tomate, vinagre, azúcar y sal.
Bueno, por supuesto, no puedes prescindir del petróleo. Por cierto, a veces las amas de casa usan mantequilla o ghee en lugar del aceite vegetal habitual; pruébalo, tal vez te guste más esta opción.
Y ahora sobre el procedimiento.
Lo primero que se echa en el aceite calentado en una sartén es la cebolla picada.
Espera hasta que adquiera un bonito color dorado y luego agrega las zanahorias. Por cierto, si decides alejarte de la receta clásica y agregar pimiento morrón al borscht, debes hacerlo en esta etapa.
Después de esto, puedes agregar remolacha al resto de los ingredientes, que se supone que se ablandarán y colorearán todos los demás componentes del borscht.
Todo lo que hay que hacer es “enriquecer” el contenido de la sartén con pasta de tomate (se puede sustituir por tomates picados) y especias. No olvides añadir un poco de agua para evitar que el asado se queme.
Y ahora, el truco de vida prometido que te ayudará a reducir el tiempo que pasas en la cocina. Simplemente duplica la cantidad de ingredientes que utilizas: pon una parte en la sartén para el borscht y la otra en el congelador, donde podrás conseguirla la próxima vez que decidas cocinar un delicioso almuerzo.