El auténtico café turco se prepara exclusivamente en una cafetería turca. Si tienes este utensilio de cocina, considera que la mitad de la batalla está hecha.
Todo lo que queda es abastecerse de los ingredientes necesarios, es decir, café y agua, y podrá empezar a preparar la cerveza.
Una última nota importante: para que la bebida esté a la altura de las expectativas, mantén las proporciones correctas. Según la versión clásica, para 1 g de café se necesitan 10 ml de agua.
Y ahora sobre cómo cocinar. De hecho, aquí no hay nada complicado: debes verter café en el turco y llenarlo con agua.
Ahora hay que poner los platos a fuego medio. Si está utilizando un quemador, asegúrese de que esté precalentado a 400 grados.
Con un palo de madera revolvemos ligeramente nuestro futuro café. La palabra clave es ligera: si haces más de 3 o 4 pasadas, la tierra puede acumularse en grumos.
No dejes que el café hierva. Al preparar una bebida en un cezve de cobre, se debe retirar del fuego en el momento en que la espuma comienza a subir. Si utilizas cerámica o loza, las burbujas que aparecen en la superficie serán señal de que es hora de apagar el fuego.
Después de llenar la taza con café, déjala durante unos minutos; esto permitirá que la bebida se infunda y los posos se hunda hasta el fondo.