Al evitar errores comunes en el almacenamiento del queso, extenderá su vida útil y garantizará la seguridad alimentaria para usted y sus seres queridos.
ADVICE.NEWS ha recopilado los 3 errores más comunes que comete mucha gente al almacenar queso.
Guardar queso en plástico
El embalaje original del queso no es muy adecuado para conservar el producto.
El queso no se puede almacenar durante mucho tiempo en envases de plástico, ya que rápidamente se cubre de moho y placa.
Para el almacenamiento, utilice papel especialmente diseñado para almacenar queso (por cierto, se llama papel para guardar queso) o pergamino.
Guardar queso en la puerta del frigorífico
En este lugar, el queso está constantemente expuesto al aire, la luz y otros factores, por lo que el producto simplemente se seca.
Guarde el queso envuelto en el cajón para verduras.
De esta forma, caerá menos luz sobre el queso.
Tenga en cuenta: dado que el queso absorbe los olores, debe almacenarse separado de otros alimentos.
Guardar queso en el congelador
Aunque congelar queso es bastante seguro, la calidad del producto se reduce significativamente y su textura se deteriora.
Si tiene queso congelado, nunca lo sirva solo como comida. Utilice producto descongelado para platos calientes donde la textura no tendrá mucha importancia.
Siguiendo estos consejos podrás almacenar adecuadamente el queso y protegerlo del moho, la sequedad y la pérdida de textura.