No tenga miedo de las fuertes heladas invernales, aseguran los médicos. Cuanto más baja el termómetro, menos activos se vuelven los virus.
Pero en el cálido invierno es mucho más fácil contraer ARVI.
Sobre esto habló el médico especialista en enfermedades infecciosas Andrei Pozdnyakov en una entrevista concedida a Rossiyskaya Gazeta .
Factores de morbilidad
1. El experto considera que el entorno óptimo para la propagación de virus se sitúa entre -10 y +10 grados centígrados.
En tales condiciones, los virus sobreviven en diferentes superficies y aumenta la posibilidad de infección por contacto.
2. Si la temperatura del aire en invierno desciende a -15ºC o más, al mismo tiempo disminuye la humedad del aire.
El aire seco previene la formación de aerosoles, lo que reduce la posibilidad de transmisión de virus por el aire.
3. Otro punto por el que disminuye la tasa de incidencia en caso de heladas severas es la preferencia por mantenerse abrigado.
Es decir, las heladas nos obligan a pasar más tiempo en casa. Como resultado, disminuye la concentración de personas en lugares públicos.
4. También hay que tener en cuenta que en invierno cálido es difícil elegir ropa cómoda.
Una persona puede sobrecalentarse en el transporte o en una tienda y, después de salir, experimenta hipotermia, lo que contribuye a la enfermedad.