Los cereales refinados consisten en granos que han sido purificados de diversas impurezas. Durante este procesamiento, del grano se eliminan no sólo las sustancias nocivas, sino también las útiles.
Como resultado de dicha limpieza, los cereales pierden sus vitaminas, minerales y oligoelementos.
Además del hecho de que no aportan ningún beneficio al cuerpo, hay algo peor: los cereales procesados de esta manera provocan fuertes aumentos de azúcar en la sangre.
Bueno, la guinda del pastel es el hecho de que consumir este tipo de cereales aumenta la probabilidad de sufrir enfermedades que afecten al sistema cardiovascular.
Por último, incluir en la dieta platos a base de cereales refinados tiene un efecto negativo en las articulaciones.
Quizás aquí terminemos de enumerar las propiedades negativas de este producto.
Si no quieres experimentar todas las “delicias” de comerlo, opta por los cereales integrales.
A diferencia de los cereales refinados, reducen el riesgo de diabetes y enfermedades cardíacas.
Otra propiedad positiva es que el consumo de cereales sin refinar normaliza los procesos de digestión.
Y esto no es de extrañar, porque contienen vitamina B, antioxidantes y la fibra que necesitamos.
Anteriormente, BelNovosti escribió sobre qué productos se pueden llevar de viaje: definitivamente no se estropearán.