Se debe prestar especial atención a aquellas formaciones pigmentadas que aparecieron en la piel durante la vida.
Como señaló la especialista Olga Mashkova, son estos lunares los que se consideran más peligrosos.
El oncólogo habló de ello durante una entrevista para Izvestia .
Según el médico, los lunares que una persona tiene desde el nacimiento a menudo pueden considerarse inofensivos.
Mashkova advirtió que si aparece dolor en la zona de los lunares y se observa inflamación, esto indica peligro.
Si los tumores cambian de color y forma, esta es una señal clara de que es necesario acudir a un examen.
Además, si surge una situación en la que se lesiona un lunar, es necesario tratarlo y luego contactar inmediatamente a un especialista.
Estos lunares pueden ser cancerígenos; existe un alto riesgo de presencia de células cancerosas en el lugar del daño.