Mirar demasiado y con demasiada frecuencia las redes sociales puede tener graves consecuencias.
El neurólogo y psicólogo Lyubov Blagodareva habló de esto con más detalle.
Informó que estaba surgiendo la adicción a la dopamina.
“Al desplazarse por un feed, el cerebro humano busca algo interesante, útil, algo que evoque emoción. Sin embargo, esto es un placer a muy corto plazo”, cita el médico a RIA Novosti .
Así, una persona busca una pequeña explosión de placer y luego se forma una adicción.
Como resultado, aparecen problemas con el sueño y el rendimiento y aumenta la ansiedad.
Vale la pena señalar que cuando un adicto mira otro video, el cerebro no procesa la información, sino que quiere recibir una oleada de dopamina.
El especialista recomendó utilizar los teléfonos inteligentes con menos frecuencia y guardarlos entre 2 y 3 horas antes de acostarse, pero preferiblemente acostarse antes de las 23 horas.