Nuestra infancia influye mucho en nuestras vidas.
La forma en que vivían nuestros padres y familiares, cómo entablaron relaciones, cómo resolvieron los problemas, cómo trataron al niño mismo, todo esto influye en nuestra vida posterior.
Veamos, junto con la psicóloga Ksenia Mathur, las áreas y ejemplos de qué y cómo puede influir en nosotros.
1. Relaciones entre un hombre y una mujer: papá y mamá, abuelos y otras figuras significativas. Cómo construyeron relaciones entre ellos, cómo mostraron atención y amor, cómo resolvieron conflictos.
Existe una alta probabilidad de que una persona entable relaciones de la misma manera en su vida, resuelva conflictos de la misma manera, etc.
2. Actitud hacia el trabajo, carrera. Vemos cómo los padres se comportan exactamente de la misma manera; lo repetiremos.
Por ejemplo, los padres odiaban su trabajo y se quejaban constantemente de él; cuando sea adulto, lo más probable es que al niño tampoco le guste mucho el trabajo.
Y lo mismo ocurre al revés, si los padres hacen lo que quieren, aman su trabajo, entonces el niño, cuando crezca, amará su trabajo y se sentirá a sí mismo y a sus deseos.
3. Actitud hacia el dinero: si un niño ve que sus padres ahorran en todo, compran solo lo más barato y de peor calidad; hay 2 opciones. O hace lo mismo, ahorra en todo, se contenta con poco, o viceversa, despilfarra el dinero y compra todo lo que quiere e incluso pide dinero prestado.
U otra situación: los padres son empresarios, saben cómo sacar provecho de todo y ganar dinero, eligen productos de calidad, saben cómo pagar y les encanta, entonces el niño adopta esta imagen del mundo y también sabe cómo ganar dinero. pagar y elegir lo mejor para sí mismo.
4. Criar hijos. Un ámbito en el que ni siquiera nos damos cuenta, pero adoptamos el comportamiento habitual de padres e hijos. Si los padres supieran apoyar, elogiar y cuidar, entonces el niño, al crecer, se comportará de la misma manera con los demás, especialmente con sus hijos.
Y si los padres golpean, castigan y humillan a su hijo, lo más probable es que el niño haga lo mismo, sin siquiera darse cuenta de que esto le causa mucho dolor.
Como regla general, estos padres dicen: "Me golpearon y crecí normal". Considerando esto la norma. O, por el contrario, contrariamente a esta actitud, el niño adulto acude a psicoterapia y desarrolla otros programas y patrones de conducta.
5. Actitud ante la salud. Si los padres fuman y beben, el niño lo desarrolla como norma. Y no tiene sentido decirle que esto es malo: tomará a sus padres como ejemplo.
O una actitud general hacia la salud, los deportes y la nutrición: si los padres intentan comer bien y practicar deportes, esto se convertirá en la norma para el niño y él lo llevará a su vida.
Podemos hablar de la influencia de la infancia durante mucho tiempo. Es importante comprender que todos venimos de la infancia y, en consecuencia, tenemos patrones y estrategias de comportamiento de los padres.
¡La buena noticia es que si somos conscientes de estas estrategias, podemos cambiarlas!
Para información
La infancia es un período del desarrollo humano en el que una persona aprende activamente a comprender el mundo que la rodea, entrena las habilidades necesarias y asimila la cultura.