La depresión infantil es un trastorno psicológico grave que puede afectar el desarrollo de un niño.
La psicóloga Irina Zolotova explicó cómo reconocer la depresión infantil.
1. Cambios de humor: el niño se pone triste, llora, apático y se desinteresa por los juegos y entretenimientos que antes le gustaban.
2. Disminución del nivel de energía: el niño se vuelve débil, somnoliento, cansado y no puede realizar actividades normales que antes podía realizar.
3. Cambios de comportamiento: el niño puede comenzar a mostrar agresión, celos, dejar de comunicarse con amigos, negarse a participar en actividades grupales y evitar comunicarse con los padres.
4. Pérdida de apetito: un niño puede volverse inquieto con la comida, comenzar a rechazar sus comidas favoritas o negarse por completo a comer.
5. Capacidad para dormir: El niño puede tener lagunas y gustarle dormir fuera del horario normal de sueño o, por el contrario, no dormir lo suficiente.
6. Disminución del éxito educativo: el niño se ha vuelto menos activo en la escuela y muestra una disminución en el rendimiento académico.
Si sospecha de depresión infantil, busque la ayuda de un médico o psicólogo para un diagnóstico y tratamiento profesional.
Pueden utilizar varios métodos para ayudar al niño, como psicoterapia, medicamentos u otros métodos. Es importante recordar que cuanto antes se identifique la depresión, más rápido y más fácil se podrá tratar.
Si nota signos de depresión en su hijo, hay varias cosas que puede hacer para ayudarlo en casa.
1. Proporcione a su hijo comida y sueño: esta es la base de un comportamiento saludable. Intenta crear una rutina diaria para que tu hijo pueda aprender fácilmente todo lo que necesita.
2. Trate de pasar más tiempo con su hijo. Trate de encontrar tiempo común para comunicarse, escuchar sus problemas, jugar juntos y desarrollarse.
3. Ayude a su hijo a afrontar la fuente de la depresión: podría ser una mudanza, el divorcio de sus padres, una disminución de las buenas conexiones con sus amigos o alguna otra situación que le provoque ansiedad.
Trate de ayudarlo a adaptarse a la nueva situación, entable gradualmente relaciones con amigos y encuentre nuevos pasatiempos o intereses.
4. Utilice técnicas de relajación para desarrollar habilidades de manejo del estrés. Algunas técnicas de relajación, como la respiración profunda, el yoga o la meditación, pueden ayudar a los niños a reducir la ansiedad y la tensión.
5. Si su hijo presenta síntomas de depresión durante más de 2 semanas, busque ayuda de un médico o psicólogo que pueda brindarle ayuda profesional.
Es importante recordar que el apoyo y cuidado que le brindes a tu hijo puede ayudarlo a superar la depresión y continuar desarrollándose adecuadamente.