Las razones de la baja autoestima de un niño pueden ser tanto internas como externas. Veamos paso a paso cómo construir tácticas en cada caso.
La psicóloga Elena Katsyuba explicó por qué el niño tiene baja autoestima.
Muy a menudo, la razón de la mayor actitud crítica de un niño hacia sí mismo son las acciones de sus propios padres.
Estamos hablando de duros excesos en la educación, cuando un padre exige demasiado a un niño, levanta la voz, se permite arremeter constantemente contra él, lo menosprecia y devalúa.
Un niño ansioso y con baja autoestima también crece en familias donde no existen reglas claras de comportamiento. El niño no entiende en qué casos cómo comportarse, no puede determinar qué es bueno y qué es malo, y por qué puede ser castigado.
¿Qué hacer? El primer paso es eliminar estas razones. La segunda etapa es empezar a hablar con el niño.
Si ya tiene más de 5 años, puedes hablar a un nivel más complejo: admite honestamente tus errores, explícale que te portaste mal con él y ahora actuarás de manera diferente.
No tengas miedo de perder la autoridad, ya que aquí el amor y la comprensión son mucho más importantes. Para él, seguirás siendo la persona principal.
La siguiente etapa es comenzar a elevar la autoestima. Estamos sinceramente interesados en su opinión, actividades favoritas, amigos, nos regocijamos por sus éxitos y lo elogiamos por sus logros grandes y pequeños. Al mismo tiempo, no es necesario llegar a los extremos ni elogiar demasiado.
Cuando se establece la confianza, hablamos de sus experiencias, situaciones perturbadoras, analizamos estos momentos y seleccionamos formas variables de comportamiento.
Cuando un padre experimenta miedo al mundo, minimiza sus propias capacidades y menosprecia su personalidad, sería muy extraño esperar un comportamiento diferente de su propio hijo. ¿Cómo puedes saber que el problema está en los padres?
Ponte en su lugar y escucha sus sentimientos. Por ejemplo, un niño experimenta estrés e incertidumbre porque en la escuela el maestro le grita a él o a toda la clase.
Un padre debe preguntarse: ¿qué siente cuando su jefe le grita? Si está abrumado por las mismas emociones, significa que es su modelo de comportamiento el que el niño está copiando.
La situación sólo puede corregirse cuando el padre supera su baja autoestima, con un especialista o por su cuenta. Y solo después de esto se puede iniciar una conversación con el niño, practicar varios modelos de comportamiento en situaciones que le resultan difíciles de afrontar debido al aumento de la ansiedad y una actitud crítica hacia sí mismo.
La baja autoestima de un niño puede ser consecuencia de la influencia del mundo exterior: amigos, compañeros de clase, profesores. En tu casa, por ejemplo, no es costumbre gritar a los demás, y cuando un niño se encuentra con este fenómeno en la escuela, puede decidir que algo anda mal con él, que no está a la altura de algún nivel.
Primero debe averiguar qué le molesta al niño y de dónde provienen las raíces del desarrollo de la baja autoestima. Y luego hablar y explicar los motivos de la persona que influyó en la aparición de estos síntomas.
Por ejemplo, si el problema es un maestro que grita y menosprecia a los niños, no hay necesidad de correr a la escuela y arreglar las cosas con el maestro. Es necesario enseñar al niño a resolver estas situaciones de forma independiente, pero armado de información.
Explícale que gritar es la emoción de quien grita, y nada más. Es posible que al profesor le haya pasado algo, esté cansado, irritado, etc. Pero esto no tiene nada que ver con el hecho de que algo anda mal contigo.
O, por ejemplo, un profesor de canto dijo que un niño no sería músico, y su gran deseo inicial de actuar y cantar se convirtió en miedo escénico.
Explique que esta es la opinión subjetiva de una persona y que con esfuerzo, cualquier cosa puede salir bien para cualquier persona. Elogia, apoya y supera el miedo escénico en pequeños pasos.
El amor y el apoyo son dos factores principales que ayudarán a mejorar la autoestima de un niño.