“Parece inofensivo, pero en siete días convierte tu jardín en un desierto.
No estamos hablando del escarabajo de la patata ni de los pulgones: estos son el enemigo número uno para el 90% de los residentes de verano.
La revista "Garden Detective" realizó una investigación y está lista para nombrar la plaga. Spoiler: ¡ya está creciendo en tu propiedad!
El pasto rastrero es el nombre del principal “saboteador” de los huertos. Sus raíces penetran hasta una profundidad de 2,5 metros, succionando agua y minerales.
“Un arbusto de pasto de trigo ‘roba’ tanto nitrógeno por temporada como el necesario para el crecimiento de 15 arbustos de pimientos”, advierte la agrónoma Maria Kovaleva.
Pero éste no es el único peligro: las raíces secretan toxinas que inhiben a las plantas cultivadas.
1. Mecánico: Desenterrar las raíces con una horca (una pala las corta, estimulando el crecimiento). Profundidad - no menos de 30 cm.
2. Químico: Los herbicidas como Roundup son efectivos, pero matan la microflora del suelo.
3. Biológico: Sembrar phacelia o centeno: sus raíces secretan sustancias inhibidoras.
Truco de vida de la abuela: Vierta agua hirviendo y vinagre sobre el pasto de trigo (1 vaso de vinagre al 9% por cada 5 litros de agua).
“Los vecinos se rieron hasta que vieron mi jardín limpio”, se jacta la jubilada Valentina de Tver.
Prevención:
“En una semana, tu cosecha podría convertirse en fertilizante para este monstruo. No le des ninguna oportunidad: ¡actúa ahora!