¿Debemos pellizcar las puntas de las frambuesas que siempre dan fruto? Se revela el secreto de una doble cosecha

03.02.2025 10:40

Las frambuesas de producción continua son un verdadero tesoro para los jardineros, capaces de deleitar con dulces bayas dos veces por temporada.

Sin embargo, para obtener la máxima cosecha, es importante conocer los entresijos del cuidado de este cultivo. Una de las cuestiones clave es la necesidad de pellizcar las puntas de los brotes.

Las frambuesas remontantes se diferencian de las variedades comunes en su capacidad de dar frutos en los brotes del año en curso. Esto permite cosechar no sólo a mediados del verano, sino también en otoño. Esta característica hace que las variedades remontantes sean atractivas para los jardineros que buscan extender la temporada de bayas frescas.

El pinzamiento de las puntas es una técnica agrícola cuyo objetivo es estimular el crecimiento de los brotes laterales. Para las frambuesas remontantes, este método se utiliza para aumentar el rendimiento y mejorar la calidad de las bayas.

Al quitar la parte superior, la planta redirige los nutrientes a la formación de ramas laterales, sobre las que posteriormente se formarán los botones florales.

frambuesa
Foto: © Belnovosti

El momento óptimo para despuntar las hojas de las frambuesas remontantes es cuando los brotes alcanzan una altura de 70-80 cm. Esto suele ocurrir a finales de mayo o principios de junio. Es importante no retrasarse con el procedimiento, ya que pellizcar demasiado tarde puede provocar un retraso en la fructificación.

El procedimiento de pinzado es sencillo: utilizar tijeras de podar o tijeras afiladas para quitar la parte superior del brote, de 5 a 10 cm de largo.

El corte se realiza por encima de una yema sana situada a la altura requerida. Después del pellizco, la planta comienza a formar activamente brotes laterales, en los que posteriormente aparecerán flores y bayas.

Un pinzado realizado correctamente ayuda a aumentar el rendimiento de las frambuesas remontantes.

Los brotes laterales formados después del procedimiento producen más ramas de fruta, lo que conduce a la formación de una mayor cantidad de bayas. Además, su calidad mejora: las bayas se vuelven más grandes y jugosas.

Autor: Valeria Kisternaya editor de recursos de internet