Los jardineros modernos recurren cada vez más a métodos naturales para mejorar la calidad del suelo.
Uno de esos métodos es el uso de plantas que ayudan a enriquecer el suelo con nutrientes, mejorar su estructura y protegerlo de la erosión.
La alfalfa (Medicago sativa) es una planta perenne conocida por su capacidad para mejorar significativamente la calidad del suelo.
Gracias a su profundo sistema radicular, la alfalfa penetra hasta varios metros en el suelo, aflojándolo y enriqueciéndolo con nitrógeno. También ayuda a controlar la erosión y previene la compactación del suelo.
El rábano (Raphanus sativus) es una planta versátil para jardineros. Sus poderosas raíces penetran profundamente en el suelo, aflojándolo y mejorando el drenaje.
Los rábanos también son útiles para el control biológico de malezas, suprimiendo el crecimiento de malezas y agregando materia orgánica a medida que se descomponen.
El trébol (Trifolium spp.) es una de las plantas más populares para mejorar la calidad del suelo debido a su capacidad para fijar nitrógeno de la atmósfera.
El trébol se utiliza a menudo como abono verde o abono verde para enriquecer el suelo con materia orgánica.
La mostaza (Brassica spp.) es una planta excelente para suprimir las malas hierbas y prevenir la erosión del suelo.
La mostaza también es capaz de liberar sustancias que inhiben los patógenos y nematodos del suelo, lo que la hace útil para mejorar la biota del suelo.
Bentgrass (Agrostis spp.) es una hierba perenne que ayuda a fortalecer la estructura del suelo y prevenir la erosión a través de su densa cubierta.
Bentgrass también ayuda a retener la humedad del suelo, lo que es especialmente útil en regiones secas.
La cebada (Hordeum vulgare) es una planta excelente para mejorar la estructura del suelo y aumentar el contenido de materia orgánica.
La cebada también ayuda a controlar las malas hierbas y protege el suelo de la erosión debido a su rápido crecimiento y su densa cobertura.
Phacelia (Phacelia tanacetifolia) es una planta que se utiliza a menudo como planta melífera y como abono verde.
Phacelia ayuda a mejorar la estructura del suelo, lo enriquece con materia orgánica y atrae insectos beneficiosos como abejas y mariquitas.
1. Rotación de cultivos: incorpore plantas mejoradoras del suelo en su rotación de cultivos para garantizar un enriquecimiento continuo de nutrientes del suelo.
2. Abono verde: utilice plantas como abono verde para crear abono verde. Corte las plantas antes de que comiencen a florecer y entiérrelas en el suelo.
3. Acolchado: Utilice plantas como abono para retener la humedad y proteger el suelo de la erosión.
El uso de plantas para mejorar el suelo es un método eficaz y respetuoso con el medio ambiente para aumentar la fertilidad y la estructura del suelo.
Alfalfa, rábanos, trébol, mostaza, bentgrass, cebada y phacelia son siete plantas que pueden mejorar notablemente la calidad del suelo de tu jardín.
Al incorporarlos a su rotación de cultivos, usándolos como abono verde o mantillo, puede crear un jardín más saludable y productivo y, al mismo tiempo, reducir la necesidad de fertilizantes químicos.
Deje que su jardín esté repleto no solo de plantas hermosas y útiles, sino que también se convierta en un ejemplo de interacción armoniosa con la naturaleza.
Al mejorar el suelo con la ayuda de estos ayudantes naturales, no sólo aumenta la fertilidad y la productividad, sino que también ayuda a mantener el ecosistema de su sitio, haciéndolo vivo y próspero.
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