Los elementos individuales del interior destruyen la armonía del espacio, pero, lo peor de todo, afectan el bienestar de la persona.
Un ejemplo desafortunado sería el interior de un dormitorio donde no se puede dormir y de vez en cuando surgen problemas de salud y de humor. Y esto no es una cuestión de feng shui.
Yulia Tychino, experta en diseño e interiores de la red BelNovosti, nos contó qué cosas no deberían estar en el dormitorio.
Todo, desde un teléfono inteligente y una tableta hasta una computadora portátil y una PC, debe ubicarse más lejos del lugar para dormir. Se trata de fuentes de luz azul perjudiciales para la hormona del sueño y que simplemente distraen el sueño nocturno.
Es mejor retirar del dormitorio cualquier equipo deportivo, como mancuernas y colchonetas de ejercicio. La excepción es la situación en la que no hay otro lugar para ellos.
En el dormitorio, nada debería distraer el descanso. Ni deportes, ni pensamientos de adelgazamiento, ni momentos de trabajo en forma de organizador y papeles desordenados.
Esto no es higiénico, se percibe como ruido visual y, por tanto, provoca estrés.
Se recomienda cambiar el colchón una vez cada 8-10 años. De lo contrario, pueden producirse problemas de espalda.