El uso de una toalla demasiado dura tiene un efecto negativo en el estado de la piel.
Y, en general, limpiarse con un producto de este tipo es simplemente desagradable.
¿Qué hacer si la toalla se ha vuelto excesivamente dura y lavarla en la máquina siguiendo todas las reglas no ayuda a solucionar el problema?
En tal situación, la sal de mesa más común acudirá en ayuda del ama de casa.
El producto a granel debe verterse en el agua en la que planea remojar previamente el producto.
Por cada litro de líquido debe haber sólo una cucharada de cloruro de sodio.
Deja la toalla en agua fría durante 30 minutos. Después de completar el procedimiento, la prenda debe colocarse en el tambor de la lavadora.
Después del lavado, lo más probable es que la toalla quede suave. Además, el producto volverá a su color brillante original.
Es poco probable que el truco de la sal dé un resultado positivo si lava la prenda incorrectamente.
Se deben seguir las siguientes recomendaciones: sustituir el detergente en polvo por un detergente líquido y elegir un modo de lavado suave (temperatura del agua moderada, velocidad baja).
Además, no se debe planchar una toalla lavada.