No todo el mundo sabe que la limpieza de suelos se puede hacer más eficaz y saludable añadiendo sal al agua. Por qué es así y qué beneficios aporta, lo aprenderá en este artículo.
La sal es un antiséptico natural que tiene las siguientes propiedades beneficiosas para la limpieza de suelos.
La sal mata las bacterias, los hongos y el moho que pueden acumularse en el suelo y provocar olores desagradables o alergias. La sal también previene la proliferación de garrapatas y pulgas, que pueden transmitir infecciones o parásitos.
La sal limpia el suelo de grasa, suciedad y polvo que puedan quedar en el suelo tras una limpieza habitual. La sal también elimina manchas de café, vino, sangre u otros líquidos que pueden arruinar el aspecto del suelo.
La sal aporta brillo y frescor al suelo, haciéndolo más suave y agradable al tacto. La sal también neutraliza los efectos negativos de la lejía u otros químicos que pueden dañar el piso.
Es necesario agregar sal al agua para limpiar el piso correctamente para no dañar el piso ni atraer insectos. Para hacer esto, debes seguir las siguientes reglas.
Si sigue estas sencillas reglas, podrá añadir correctamente sal al agua de limpieza de suelos y mantenerlo limpio y saludable. Entonces el suelo le servirá durante mucho tiempo y le deleitará con su aspecto y calidad.