Sumergir la pasta en líquido se considera una acción elemental.
Pero no es tan simple. Resulta que algunos cocineros aficionados cometen dos errores graves ya en esta etapa de preparación de la guarnición.
El primer error (menos común) es agregar pasta a agua moderadamente tibia o incluso fría.
Recuerda: el líquido al que envías el producto de harina debe hervir intensamente.
De lo contrario, el resultado será un trozo de pasta poco apetecible.
Hay un segundo error. A diferencia del primero, lo hacen casi todos los aficionados, destaca la cocinera y panadera de cuarta categoría de la publicación Belnovosti, Yulia Arkhipova.
La gran mayoría de cocineros lo tienen claro: “No importa en qué parte de la sartén pongas la pasta”.
¡Y ésta es una conclusión errónea!
¡Resulta que necesitas verter la pasta en el centro del recipiente!
El caso es que es en esta parte de los utensilios de cocina donde el líquido hierve con mayor intensidad.
Al sumergir la pasta más cerca del borde de la sartén, es poco probable que obtenga una guarnición de calidad.
Hay un punto más importante: después de verter la pasta, inmediatamente ponga el fuego al máximo. Después de todo, es necesario volver a hervir el líquido "calmado".