Si necesitamos utilizar cebollas frescas en un plato terminado, puede surgir un problema grave.
El caso es que esta verdura puede tener un sabor amargo muy persistente y notorio.
Esto simplemente arruinará el plato, ya que habrá un desequilibrio de los componentes, señala la cocinera Yulia Arkhipova, experta en temas culinarios de la publicación de la red BelNovosti.
Muy a menudo se recomienda recurrir al proceso de encurtido de verduras. Si este método no le conviene por algún motivo, puede considerar opciones alternativas.
Un método sencillo y práctico que puedes probar con seguridad. Picar la verdura. Luego colócalo en un recipiente con agua fría y hielo.
Después de unos 15 minutos, puedes escurrir el agua y utilizar la cebolla.
La sal gruesa también será ideal para esta tarea. Combine la cebolla picada con este ingrediente y no espere más de 15 minutos.
Será necesario enjuagar la cebolla con agua y podrás empezar a cocinar.