Mucha gente come pollo hervido o frito con piel y no ve nada malo en ello.
A algunas personas les encanta la piel del pollo. Sin embargo, los nutricionistas advierten de los peligros de dejarse llevar por este manjar.
Te explicamos por qué debes abandonar el hábito de comer pollo con piel.
Contrariamente a la creencia popular, la piel del pollo, incluso hervida, no es tan saludable.
En primer lugar, contiene mucho colesterol. En segundo lugar, las sustancias nocivas se acumulan en la piel.
Los expertos en nutrición recomiendan encarecidamente cortar la piel del pollo.
Anteriormente te contamos cómo cocinar chuletas de pollo dietéticas.