Gracias al café nos sentimos más alerta y activos, por eso la bebida no pierde su relevancia.
También ayuda a mejorar la función cerebral, lo que ayuda a la hora de resolver problemas intelectuales.
Sin embargo, el café no sólo es una bebida saludable, sino que también puede deleitarte con su sabor y aromas.
De todos es sabido que el desayuno nos ayuda a quitarnos el hambre hasta la hora del almuerzo. Pero no todo el mundo puede “obligarse” a tomar un buen desayuno.
En tales casos, una taza de café con mantequilla vendrá al rescate. Incluso un pequeño trozo del producto hará que la bebida sea más rica y tierna.
Solo una pizca de sal marina medianamente molida hará que la bebida sea mucho más brillante e interesante. Esto mejora significativamente el sabor del café.
Esta opción es apta para verdaderos conocedores del delicioso café. Puedes utilizar vainas de especias en lugar de extracto de vainilla.
La opción más común ha ganado tanta popularidad por una razón: gracias a la vainilla, la bebida resulta muy sabrosa.
Puedes agregar un par de dientes de jengibre para obtener un sabor más rico y un aroma más brillante. También puedes utilizar jengibre molido: una pizca será suficiente.